ARIZONA- En su trayecto hacia el lugar donde se supone encontrarían una mejor vida, miles de familias inmigrantes enfrentan una batalla a veces silenciosa y otras, desconocida. Ante la falta de documentos legales o un futuro incierto, padecen importantes afecciones a la salud física y mental, de acuerdo con expertos.
Este es el retrato de síntomas que dominan la vida cotidiana y la salud mental de una comunidad inmigrante.
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Lo que debes saber
- Las siguientes organizaciones ofrecen recursos, capacitaciones, talleres y herramientas gratis para personas con o sin documentos: Organización Lucha https://www.luchaaz.org/
- Organización Ace: https://www.empoweraz.org/
- One Arizona: https://onearizona.org/ , Aliento: https://www.alientoaz.org/ , Corazón: https://corazonaz.org/ y Trabajadores del sur: http://www.southsideworkercenter.org/
“Llegué muy joven, sin el idioma, sin familia, sin nada…”, relata Yuleni Caiceros que dejó su natal Veracruz hace más de 18 años, cargando consigo sólo la ilusión de una mejor vida.
Desde su llegada, Caiceros , de 35 años ha dedicado su vida a trabajar para salir adelante junto a su esposo y 2 pequeños, pero como miles nunca imaginó que lejos de una mejor vida, encontraría el rechazo.
A pesar del tiempo, Yuleni no ha podido regularizar su estatus migratorio por lo que el acceso a servicios básicos sociales y de salud es limitado.
Estrés y depresión
Noticias
Para el Doctor Frank Moreno, del Colegio de Medicina en la Universidad de Arizona en Tucson, los migrantes tienen niveles de estrés, depresión asociados a su condición que también reflejan otros factores sociales.
Padecimientos que el experto asegura, son propicios para desarrollar otro tipo de problemas en la salud.
“Dolores de cabeza, úlceras, alta presión, problemas para regular el azúcar, todas las enfermedades crónicas se complican por el estrés”.