ARIZONA- Kari Lake lanza una campaña para el Senado de Estados Unidos por un escaño en Arizona en un llamativo mitin en Scottsdale este martes, sin haber admitido nunca que perdió la elección del año pasado para encabezar el gobierno de Arizona.
La ex presentadora de noticias en televisión está probando nuevos mensajes y buscando el apoyo de republicanos nacionales a los que ha insultado en el pasado. Eso preocupa a algunos integrantes del Partido Republicano que temen que les cueste una contienda que podría decidir el control del Senado.
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"Kari Lake puede ganar, pero tendrá que realizar una campaña diferente a la que realizó hace dos años, y tendrá que convertirse en una candidata seria que hable sobre temas serios que preocupan a los votantes republicanos e independientes todos los días", dijo Chris. Baker, consultor político republicano radicado en Arizona. "Y ella no ha hecho mucho de eso este año".
Después de llamar una vez al senador de Kentucky Mitch McConnell un “viejo murciélago” y decir que necesitaba ser reemplazado como líder republicano, Lake ahora dice que lo apoyaría si es elegida. El año pasado, calificó el aborto como “el pecado supremo” y apoyó una prohibición casi total del aborto en Arizona. Ahora dice que no respaldaría una prohibición federal del aborto.
Los líderes republicanos nacionales creen que un candidato republicano podría aprovechar lo que podría ser una elección a tres bandas si la senadora Kyrsten Sinema busca la reelección. Sinema, una ex demócrata que se independizó el año pasado, se está preparando para una campaña, pero no ha dicho si buscará un segundo mandato. Es probable que el representante federal Rubén Gallego tenga asegurada la nominación demócrata.
Lake se reunió recientemente con el senador Steve Daines de Montana, quien dirige el trabajo de campaña del Partido Republicano en el Senado como presidente del Comité Senatorial Republicano Nacional, y vio a varios otros senadores republicanos durante un viaje a Washington. Daines ha instado públicamente a Lake a centrarse en el futuro en lugar de volver a litigar elecciones pasadas.
La perdió ante la ahora gobernadora Hobbs por menos de 1 punto. Aproximadamente cuatro de cada 10 votantes de Arizona en las elecciones de 2022 dijeron que estaban “muy preocupados” de que las opiniones de Lake fueran demasiado extremas, según AP VoteCast, una encuesta entre votantes estadounidenses.
