El Equipo T de Telenoticias inició la serie investigativa llamada "Condena Perpetua".
¿Cómo sería pasar el resto de la vida en una prisión? No poder disfrutar del bien más preciado de un ser humano: la libertad.
Esa es la dura realidad de cientos de confinados que saben que nunca podrán salir del calabozo, que podría convertirse en sus tumbas.
Una madre e hija presas por asesinato contaron cómo se vive dentro de la cárcel cuando no hay expectativas de salir en libertad.
“Estar enjaulado como un animal es bien difícil...estás pagando una condena que no te da la posibilidad de rehabilitarse ni de reinsertarse en la comunidad”, dijo Omayra Torres Sánchez, de 28 años.
Ella y su madre, Modesta Sánchez, de 70 años, fueron condenadas en el 2008 en la municipalidad de Arecibo por el asesinato de la pareja de Omayra.
Ambas cumplen una condena de 130 años. La mujer dijo que le gustaría poder estar en libertad para pasar más tiempo con su hijo de 9 años, a quien tuvo en prisión.
Puerto Rico
“Mantenemos con firmeza que somos inocentes”, dijo Omayra.
