PHOENIX - La mujer cuyo bebé recién nacido fue encontrado muerto la semana pasada en el baño de un almacén de Amazon fue arrestada por la Policía de Phoenix.
Samantha Vivier, de 22 años, fue acusada de un cargo de eliminación ilegal de restos humanos, según dijo el Departamento de Policía de Phoenix en un mensaje electrónico.
Además, la Oficina del Médico Forense del Condado de Maricopa investiga la muerte de la recién nacida, quien fue hallada en el interior del almacén de Amazon, una instalación segura cerca de Avenida 51 y Lower Buckeye Road, alrededor de las 8:30 p.m. del pasado miércoles.
Según un portavoz policial, la bebé parecía ser de término completo o cercano a las 40 semanas.
Los investigadores localizaron y entrevistaron a la madre poco después de que encontraron al bebé, pero no fue arrestada hasta el martes.
Por el momento, las autoridades no proporcionaron información sobre cómo identificaron a Vivier, cómo murió la recién nacida o el por qué la mujer la abandonó.
Según la ley de Arizona, las madres pueden dejar de forma anónima a los recién nacidos ilesos en lugares designados como "refugio seguro", que incluyen hospitales, ambulancias, iglesias, estaciones de bomberos y agencias de adopción
La ley, aprobada en 2001, estable que en esos casos los bebés deben ser menores de 72 horas y ser entregado a una persona. Quien sigue esas instrucciones no son llevadas a proceso.
