TUCSON- Las iglesias católicas en Tucson cerrarán durante un mes en un esfuerzo por frenar la propagación de COVID-19, anunció la Diócesis de Tucson.
Las iglesias estarán cerradas para todas las misas desde el 8 de enero hasta el 5 de febrero. En algunas circunstancias, los pastores podrán solicitar permiso para celebrar algunas misas dentro de las iglesias, de acuerdo con un comunicado de la Diócesis.
Los funerales y bodas se pueden celebrar en el interior, pero estarán limitados a 25 personas, mientras que los bautismos están limitados a 10 personas.
"Un período de cuatro semanas debería marcar una diferencia considerable en la disponibilidad de la vacuna COVID-19 para aquellos en mayor riesgo", dijo el obispo Edward Weisenburger de la Diócesis de Tucson en un comunicado.
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La Diócesis está pidiendo a los pastores a celebrar misas a través de Internet y ofrecer la comunión al aire libre. Las oficinas parroquiales también estarán cerradas al público durante el período de cuatro semanas.