
PHOENIX — Como estudiante universitario de primera generación, Austin Kissinger ansiaba celebrar su graduación con otros estudiantes de orígenes similares que se ayudaron mutuamente a encontrar su camino en la Universidad de Kentucky.
Normalmente, los estudiantes de Kentucky que son los primeros de su familia en graduarse de la universidad eligen a un miembro del profesorado para que los acompañe en una ceremonia especial.
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A principios de este mes, la universidad canceló la ceremonia, junto con otras convocatorias que reconocen a estudiantes negros y LGBTQ+, citando la campaña del gobierno de Trump para frenar los programas de diversidad, equidad e inclusión.
Esos grupos estudiantiles reunieron recursos para una celebración conjunta fuera del campus, sin la participación de la universidad, pero Kissinger dijo que el cambio radical los dejó a él y a otros sintiéndose sin apoyo.
"Es como si nos estuvieran quitando la celebración, como si no nos estuvieran dejando aceptar quiénes queremos ser", dijo Kissinger, un estudiante de último año que se gradúa y dirige la Organización de Estudiantes de Primera Generación de la universidad. "No nos están dejando representar lo que hacemos en la universidad".
Las peticiones del presidente Donald Trump de eliminar cualquier programa que trate a los estudiantes de forma diferente por su raza han generado un nuevo escrutinio sobre las ceremonias de graduación de afinidad. Estos eventos han sido durante mucho tiempo una forma de construir comunidad y reconocer los logros y las experiencias únicas de los estudiantes subrepresentados.
Muchas ceremonias de afinidad se celebrarán con normalidad en todo el país, y las universidades afirman que cumplen con las nuevas directrices.
Sin embargo, algunas universidades están retirando su apoyo.
Entre ellas se encuentra la Universidad de Harvard, que se enfrenta al gobierno por las demandas relacionadas con el activismo y las iniciativas de diversidad en el campus.
A pesar de haber demandado al gobierno por algunos de sus intentos de imponer cambios en el campus, Harvard informó a los estudiantes que ya no proporcionaría financiación, personal ni espacios para las celebraciones de afinidad, según informó el periódico estudiantil Harvard Crimson.
Algunas universidades actúan para cumplir con las directrices del gobierno de Trump.
En la Universidad de Kentucky, el portavoz Jay Blanton afirmó que la ceremonia principal de graduación celebra a todos los estudiantes. Añadió que la universidad eliminó otras ceremonias para cumplir con la ley y "cómo creemos que la administración la está interpretando".
“El éxito y el apoyo a nuestros estudiantes es un principio y un propósito de suma importancia para nosotros. Todo lo que hacemos en este campus lo hacemos con ese objetivo en mente”, declaró Blanton. “Al mismo tiempo, creemos que debemos cumplir con la ley y así lo estamos haciendo aquí”.
En todo el país, las universidades se han visto sometidas a una creciente presión para alinearse con la agenda política del gobierno de Trump, que ya ha congelado miles de millones de dólares en becas para Harvard, la Universidad de Columbia y otras instituciones de educación superior, alegando que no han hecho lo suficiente para combatir el antisemitismo.
El Departamento de Educación ordenó a las universidades que se distanciaran de la DEI mediante una carta de "Estimado Colega" en febrero. Añadió que una decisión de la Corte Suprema de 2023 que prohibía el uso de preferencias raciales en las admisiones universitarias también se aplicaba a aspectos como la contratación, las becas y las ceremonias de graduación.
El gobierno sostuvo que las instituciones educativas estadounidenses han estado discriminando a los estudiantes, incluyendo a los estudiantes blancos y asiático-americanos.
“En un vergonzoso eco de un período más oscuro en la historia de este país, muchas escuelas y universidades estadounidenses incluso fomentan la segregación racial en las ceremonias de graduación, en los dormitorios y otras instalaciones”, decía la carta, firmada por Craig Trainor, subsecretario interino de Derechos Civiles del Departamento de Educación.
Esta práctica tiene sus raíces en la época de la segregación en algunas escuelas, pero los organizadores de las convocatorias para estudiantes negros afirman que son una forma de celebrar los logros de poblaciones estudiantiles diversas que antes eran ignoradas.
Muchas universidades también tienen "graduaciones Lavanda", que celebran a los estudiantes LGBTQ+ y surgieron de una época de décadas atrás en la que muchos carecían del apoyo familiar.
Para los estudiantes que son los primeros en sus familias en asistir a la universidad, puede ser fácil sentirse fuera de lugar o inseguros de dónde buscar ayuda, dijo Kissinger.
En Kentucky, comentó que a menudo sentía que tenía que resolver todo por su cuenta. La ceremonia de afinidad, explicó, pretendía ser una celebración de la resiliencia y el orgullo por haber llegado a la graduación.
Con las ceremonias canceladas, algunos encuentran otras maneras de mantener las tradiciones
Las Universidades Comunitarias del Condado de Maricopa de Arizona cancelaron todas sus ceremonias de graduación culturales y de interés especial, citando en un comunicado las "prioridades de cumplimiento" establecidas por el Departamento de Educación de EEUU.
Sin embargo, la Comunidad Indígena Salt River Pima-Maricopa se ofreció como voluntaria para celebrar una ceremonia de graduación para los graduados indígenas estadounidenses.
"Si bien estamos profundamente decepcionados por la cancelación de las ceremonias de graduación para estudiantes pertenecientes a minorías, creemos que es importante unirnos como comunidad para honrar a nuestros graduados y sus familias", declaró el presidente de la comunidad, Martin Harvier, en un comunicado.
En la Universidad de Ohio, Aaron Thomas organizó la celebración del fin de semana de exalumnos afroamericanos de su alma máter esta primavera, después de que la universidad lo cancelara para cumplir con una prohibición estatal sobre la Diversidad e Igualdad (DEI), que coincide con la directiva federal.
Thomas, quien dirige una productora cerca del campus universitario en Athens, Ohio, planeaba cubrir los gastos de una barbacoa para exalumnos hasta que la alcaldía, organizaciones sin fines de lucro y restaurantes colaboraran para organizar un fin de semana de eventos.
Entre las universidades con eventos de afinidad planificados para las próximas semanas se encuentra la Universidad Estatal de California en Long Beach, que afirma que sus celebraciones para estudiantes de las islas del Pacífico y camboyanos, entre otros, cumplen con las directrices de la administración porque están abiertas a todos.
“Nuestros estudiantes esperan con ansias estas celebraciones, que están abiertas a todos y se ajustan a las directrices del Departamento de Educación”, declaró el portavoz Jim Milbury.
En su sitio web, un comunicado con información sobre las celebraciones culturales reconoce el cambiante panorama universitario:
“En particular, a medida que evolucionan las políticas federales de inmigración, podría existir la preocupación de que representantes y funcionarios de las agencias de control de inmigración de EEUU visiten los campus universitarios de todo el país”, afirma. “Si bien no tenemos conocimiento de ninguna visita planeada a nuestro campus, ofrecemos esta información”.