Dos potentes cabezazos dieron la victoria a Holanda sobre Italia en el Stade duHainaut de Valenciennes, dándole un pase por primera vez en su historia de pasar a las semifinales de una Copa Mundial Femenina de la FIFA.
La maquinaria holandesa dominó durante los primeros minutos del partido, aunque Italia se recuperó pronto y empezó a ejercer presión en el arco de las "Oranjeleeuwinnen".
Al minuto 36, la delantera italiana Valentina Giancinti hizo un poderoso intento de anotar pero la portera Sari van Veenendaal logró patear el balón justo a tiempo.
Al minuto 41, la defensa italiana Elena Linari recibe una tarjeta amarilla de la árbitro que da a la selección holandesa el primer tiro penal del partido, aunque la portera Laura Giuliani terminó atrapando el balón.
Tras el descanso, las holandesas regresaron repotenciadas y dieron varios disparos al arco italiano que pegaron contra el poste o fueron salvados por Giuliani.
Las italianas, por su parte, perdieron la concentración y tres de sus jugadoras recibieron tarjetas amarillas por varias faltas.
Al minuto 66, Holanda logró otro penal luego de una falta de la italiana Alia Guagni. El tiro fue ejecutado por la mediocampista Sherida Spitse, pero el balón se desvió pulgadas a la izquierda.
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Un cabezazo de Vivianne Miedema al minuto 71 le da el primer gol a la selección holandesa y un respiro en el partido. Es además el tercer gol que hace durante el torneo la delantera, quien rompió hace dos semanas el récord de goles anotados por una jugadora holandesa.
Al minuto 80 del partido, Holanda anota su segundo gol con un cabezazo de Stefanie Van Der Gragt tras un tiro libre de Spitse.
Jugando su primera Copa del Mundo en 20 años, Italia ya había superado las expectativas al ganar a su grupo por delante de Brasil y Australia antes de superar a China con relativa facilidad.
Por su parte, para Holanda, las actuales campeonas europeas, esté es su segunda participación en una Copa Mundial Femenina. Estuvieron hace cuatro años, cuando lograron llegar a cuartos de final.
El partido del jueves tuvo varias interrupciones de refrescamiento, debido a la ola de calor que afecta Francia esta semana. Holanda hizo un intento infructuoso de que el juego se pospusiera hasta más tarde el sábado para evitar las temperaturas más duras de la ola de calor francesa.
