La degradación ambiental que actualmente vive Centroamérica es reversible y se puede contrarrestar con educación y con el compromiso de la población de cambiar esta situación, afirmó el experto alemán Laszlo Pancel, durante una entrevista con Efe en El Salvador.
El también asesor principal del Programa Redd+Landscape/CCAD-GIZ de la Cooperación Alemana indicó que los países centroamericanos pierden anualmente alrededor de 280.000 hectáreas de bosques por diversas razones.
"La situación de degradación ambiental en la región es reversible pero se necesita educar y concienciar a las personas para hacerles saber que hay que tener un cariño a su propio país y no abrir la ventana del auto y dejar caer la bolsa de plástico", sostuvo.
El experto alemán enfatizó en que los problemas ambientales también se pueden solucionar con una "conversión de la sociedad, que es la que debe atender integralmente esta problemática que en el futuro afectará mayormente a las próximas generaciones".
"Siento pena que las nuevas generaciones se van a enfrentar al cambio climático, por ello es necesario dar seguimiento a esta situación, estar de cerca y plantar nuestras tierras para evitar la degradación y la deforestación", sostuvo.
Ante la degradación ambiental que vive Centroamérica y el resto del mundo, la Cooperación Alemana, a través del Programa Redd+Landscape/CCAD-GIZ, desarrolla en diferentes países la iniciativa Bonn Challenge o Desafío Bonn, cuya meta es la restauración de 350 millones de hectáreas de tierras degradadas y desforestadas para 2030.
En Centroamérica dicho programa se implementa con "éxito" en El Salvador, desde 2015, y en Panamá, desde 2016; el próximo 12 de junio será lanzado en Honduras y en 2018 en Guatemala, detalló Pancel.
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Explicó que "el Desafío Bonn nació en 2011 en la ciudad de Bonn, Alemania, con el propósito de tener un instrumento que recupera terrenos forestales de una manera flexible y según la capacidad de cada uno de los países que adoptan la iniciativa".
